DESCENTRALIZACIÓN DE LAS DIVISAS: PROCESO NECESARIO PARA DINAMIZAR LA ECONOMÍA.
Por: Livhy Barceló Vázquez
El concepto de planificación siempre ha estado presente en el modelo económico cubano, a partir del establecimiento de mecanismos administrativos básicamente para la distribución de los recursos materiales, entre ellos las divisas extranjeras.
Previo a la aprobación de la resolución 115 del Ministerio de Economía y Planificación, en agosto del pasado año, la asignación de divisas estaba en correspondencia con la disponibilidad de recursos financieros y no con la necesidad real de cada empresa para desarrollar su actividad fundamental.
La directora de divisas y comercio exterior, del Ministerio de Economía y Planificación (MEP), Yunet Medida Delgado, señaló que la descentralización de las divisas es un proceso necesario para dinamizar los flujos internos de economía. Y agregó que las empresas exportadoras pueden retener el 80 de la liquidez obtenida por las ventas de bienes y en el caso de los servicios profesionales el porciento es un poco menor.
“Con la retención de un porciento significativo por la venta de bienes exportables, las empresas productoras podrán irrigar a lo interno de la economía y consolidar las articulaciones entre empresas, a partir de un encadenamiento productivo real tanto material como financiero. Es decisión de los empresarios, en el caso de los exportadores, cuánto le van a trasferir a sus proveedores fundamentales para garantizar esas exportaciones”, acotó.
Otras de las variantes utilizadas por el sistema empresarial para la captación de divisas son las ventas a la Zona Especial de Desarrollo Mariel, las colaboraciones internacionales, así como las ventas on line y al circuito de tiendas que operan en moneda libremente convertible (MLC).
En sus inicios se previó para el 2021 la incorporación, con carácter obligatorio, de todas las empresas nacionales. Sin embargo, el rebrote de la COVID-19 agudizó las contracciones de la economía y demostró que el proceso de implementación debería ser gradual y atender de forma diferenciada las particularidades de cada entidad.
Mediante la resolución 115 se pretende que las empresas busquen las fuentes financieras necesarias para satisfacer sus necesidades de producción. Al particularizar sobre las ventas en MLC a las cadenas de tiendas, la directiva resaltó que el diseño está concebido para que con los honorarios de esas ventas también se garantice un nivel de oferta en el circuito de la moneda nacional.
“La descentralización de las divisas y el ordenamiento monetario son procesos nuevos para el sistema empresarial que por mucho tiempo vivió bajo la egida de la centralización de todos los procesos. A lo largo de estos años hemos trabajado para dotar al empresariado cubano de más facultades que le permitan tomar decisiones. Sin embargo, ese cambio de pensamiento y acción se adquiere con el tiempo, a mi juicio, a veces demasiado lento”, subrayó.
Medina Delgado informó que el Ministerio de Economía y Planificación trabaja tanto con las cadenas de tiendas como con los productores nacionales para que ambos logren definir los precios y concertar los montos de mercancías que se ubicaran tanto en las cadenas de tiendas en MLC como en las de moneda nacional, “no lograremos nada con la medida si todo el dinero que se capta en las tiendas en divisa se destina a la importación y no a dinamizar las producciones nacionales”.
Igualmente la norma jurídica para la descentralización de las divisas contempla otras fuentes de financiamiento a partir del exceso de liquidez de divisas derivado de las empresas exportadoras. En el caso particular de los excesos permanentes se prevé la formación de fondos para financiar actividades estratégicas para la economía “estos fondos se concertan entre la entidad exportadora y el MEP. Hasta la fecha el país dispone de un fondo para el desarrollo del turismo y se trabaja en el diseño de otros para mejoras en el sector agricultura y la aviación”; puntualizó la directora de divisas.
Debido a la estacionalidad de muchas de las exportaciones, como la del camarón y el azúcar, el exceso de liquidez temporal de algunas empresas pudiera ponerse en depósito en instituciones bancarias. Dichos fondos podrían financiar otras producciones, en un término inferior a los plazos convenidos entre ambas partes. Aun cuando la resolución, ofrece esta nueva variante para el empresariado cubano las condiciones reales de la economía no han permitido llevarlo a vías de hecho.
Al margen de que solo 322 empresas hoy aplican el proceso de descentralización de las divisas, la nueva normativa ha generado un despertar del sector empresarial en la búsqueda de diversas alternativas de financiamiento que hagan viable sus compromisos con el plan de la economía.
(Publicado por Radio Rebelde)